Atenas se sume en el caos tras la muerte de un estudiante
LAURA LÓPEZ
Los manifestantes han tomando el centro de la ciudad, destruyendo a su paso todos los locales y vitrinas de bancos, saqueando tiendas y volcando coches. Incluso el gran árbol de navidad que estaba en la plaza Sindagma ha caído presa de las llamas provocadas por una bomba incendiaria. También se han utilizado bombas incendiarias contra varios edificios, por lo que los bomberos han tenido que rescatar a gente atrapada en los pisos superiores de algunos de los mismos.
La policía responde de forma pasiva a estos actos de vandalismo usando gases lacrimógenos, con los que han inundado el centro de Atenas y de Salónica, la segunda ciudad más importante del país.
Debido a las especulaciones de la posible instauración de un Estado de Excepción, el primer ministro griego, Kostas Karamanlis, ha convocado una sesión extraordinaria del Consejo de Ministros. El jefe del partido opositor Movimiento Socialista Panheleno (Pasok), Giorgos Papandreou, ha pedido indirectamente la renuncia del gobierno puesto que "Todos los jóvenes dicen hoy: 'Ya es suficiente de este gobierno que no acepta su responsabilidad'".